El campo mexiquense necesita fertilizante – Carta dirigida para Alfredo del Mazo Maza

LIC. ALFREDO DEL MAZO MAZA

GOBERNADOR CONSTITUCIONAL DEL ESTADO DE MÉXICO

A LA OPINIÓN PÚBLICA

EL CAMPO MEXIQUENSE NECESITA FERTILIZANTE

El Comité Estatal del Movimiento Antorchista en el Estado de México una vez más se dirige a Usted, señor gobernador Alfredo Del Mazo Maza, para solicitarle tenga a bien apoyar a 50 mil campesinos humildes con fertilizante subsidiado al 50 por ciento, a fin de ayudar a la economía de miles de labradores chicos y medianos, quienes durante esta pandemia se están comiendo el poco maíz o los pocos animales que tenian.

Desde el pasado mes de noviembre, los campesinos humildes entregaron solicitud de apoyo con fertilizante al gobierno estatal, dado que su raquítica economía no les alcanza para comprar por su propia cuenta los químicos que requieren para hacer crecer y fortalecer las plantas de maíz, granos y frutos que fundamentalmente les sirven para el autoconsumo y, una mínima parte, para vender y obtener dinero para otras necesidades de sus familias. Dichos campesinos viven en zonas muy pobres, de alta marginación.

Señor gobernador: Usted sabe que los insumos agrícolas representan una fuerte inversión económica que no pueden hacer los campesinos más pobres; por eso, respetuosamente le solicitamos una vez más que apoye al campo mexiquense con insumos agrícolas.

Desgraciadamente la llegada de la pandemia por el Covid-19 a nuestro país, y en particular al Estado de México, ya no permitió al antorchismo mexiquense seguir buscando pláticas con las autoridades correspondientes a fin de que el fertilizante llegara a los campesinos más necesitados, pues el Covid-19 frenó toda actividad social y económica y dejó en el total desamparo a millones de mexicanos; en particular, al sector campesino, el cual es de los más vulnerables.

Por ello, una vez más apelamos a su sensibilidad política, a su compromiso de gobernar con justicia para todos y, ante todo, a su humanismo. Sepa usted que la inversión necesaria para hacer producir una hectárea de maíz anda alrededor de los veinte mil pesos, pues los labriegos deben cubrir los gastos de rastra, arados, yunta, semilla, fertilizante, herbicida, fungicida, escarda, fertilizante y mucha, mucha mano de obra, la cual es necesaria para llevar la siembra a la cosecha. Nadie contabiliza a la mano de obra en la inversión porque el trabajo lo hacen las familias campesinas enteras, pero que sí se siente  en el estómago y en las costillas pues el trabajo es duro, el frío entumece y el sol quema, pero no pueden dejar de hacerlo porque de él se sustentan.

Para todos es conocido que el temporal está muy avanzado, que el uso del fertilizante debió utilizarse en las primeras estapas de la siembra, que se dio desde finales de marzo o principios de abril, que es cuando se usa el Dap 18-46, Súper simple o el Sulfato de amonio, dependiendo la región y el tipo de clima. No obstante, los campesinos todavía tienen esperanzas de que el Gobierno del Estado de México los apoye con el fertilizante porque, de continuar su cultivo sin fertilizar, perderán el  50 por ciento del rendimiento de maíz por hectárea, o sea de dos a tres toneladas.

De seguir sin fertilizante, en el sector campesino estatal se perderán 120 mil toneladas de maíz en total, deficit que irremediablemente ocasionará el alza de precios de la tortilla, lo cual perjudicará a todos los mexiquenses, quienes de por sí ya padecen los efectos económicos que trajo consigo la pandemia del Covid-19.

Por ello, respetuosamente volvemos a solicitarle, señor Gobernador, que apoye a los campesinos con fertilizante subsidiado al 50 por ciento. Si antes era apremiante este apoyo, hoy es cuestión de vida o muerte.

Señor gobernador: estamos a tiempo para que brinde este apoyo dado que en el mes de junio toca la segunda fertilizada, lo que quiere decir que si Usted los apoya estarían en condiciones de levantar las milpas y lograr el sustento de miles de familias campesinas.

Muy respetuosamente:

COMITÉ ESTATAL DEL MOVIMIENTO ANTORCHISTA EN EL ESTADO DE MÉXICO