EQUIDAD DE GÉNERO ES GARANTIZAR EL ACCESO A DERECHOS FUNDAMENTALES

equidadPara erradicar la discriminación a la mujer y empoderarla, debe existir un proceso de coeducación por parte de la familia y la escuela, para que se identifiquen las diferencias entre el sector masculino y el femenino, y al mismo tiempo se enseñe a respetarlas, destacó Jazmín Romero Romero.La integrante de la Unidad de Equidad de Género y Eliminación de la Violencia de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de México, indicó que la equidad de género no es una lucha contra el hombre, sino es brindar a todas las personas, independientemente de su género, las mismas oportunidades, condiciones y tratamiento para garantizar el acceso a sus derechos fundamentales.
En ese sentido, debe fomentarse a través de acciones afirmativas y políticas públicas, además de promoverse en los diferentes ámbitos como la familia, el espacio laboral y la comunidad.
Romero Romero mencionó la importancia de erradicar palabras comunes que forman parte del vocabulario pero que denigran a las mujeres; los estereotipos que se difunden a través de los medios de comunicación, así como disposiciones en las instituciones públicas o actitudes discriminatorias contra personas del sexo opuesto.
Lo esencial dijo, es lograr un entorno favorable de paz, igualdad y justicia, para lograr la convivencia y respeto; por tanto, en la familia debe hacerse un reparto equitativo de las tareas domésticas, sobre todo en lo referente al cuidado de los hijos, pues por lo general recae en la mujer.
En cuanto al ámbito político, expresó que a través de las cuotas de género, el sector femenino ya tiene representación en ese tipo de espacios pero se requiere más; asimismo debe garantizarse el acceso pleno al empleo en condiciones similares para hombres y mujeres, a fin de terminar con las limitaciones como el embarazo o matrimonio, que implican ciertos permisos para ausentarse y que el patrón no está dispuesto a brindar al sector femenino.
Finalmente propuso tres acciones básicas que ayudarán a fortalecer la equidad de género: reconocer las diferencias para evitar la discriminación y la violencia; identificar y rechazar las expresiones sexistas; así como establecer acciones que promuevan la equidad entre los dos sexos, en apego a los derechos humanos.