Necesario impulsar la alfabetización musical: Omar Gómez

  • La educación musical en el país tiene una historia complicada y difusa
  • Los mayores intentos se hicieron en las grandes ciudades y siempre con resultados pobrísimos, aunque satisfactorios.
  • A nivel nacional y estatal no ha habido un programa de educación musical que contemple la alfabetización de los educandos

Omar Gómez Díaz, profesor del Conservatorio de Música del Estado de México propuso que lleve a cabo una estrategia nacional de educación para impartir instrucción musical desde el nivel básico, es decir, preescolar, primaria y secundaria, con la finalidad de que los niños y niñas tengan al alcance de su mano los conocimientos para comprender la música como se entiende el español o las matemáticas, pero además para ayudar al manejo socioemocional de los individuos.

Abundó que, a nivel nacional o estatal no ha habido un programa de educación musical que contemple la alfabetización de los educandos del país a nivel general, como sí lo hay de otras asignaturas como inglés, matemáticas, español y otras ciencias. Pero además la implementación de dicha estrategia no sería tan costosa como otros proyectos.

El Educador musical y licenciado en composición musical, Omar Gómez Díaz refiere que ha presentado, desde marzo del 2019, un “plan Nacional de estandarización de la educación musical” enfocado en subsanar dicha deficiencia educativa a través de la capacitación de docentes activos y la inclusión de contenidos musicales obligatorios que lleven a la comunidad escolar al dominio del lenguaje musical en su escritura, lectura y entonación cotidiana.

“El proyecto ha sido presentado en atención ciudadana de palacio nacional en dos ocasiones, pero los organismos que han tenido conocimiento del mismo han declarado no tener la infraestructura, sin abundar más sobre los posibles mecanismos a seguir para crearla. El proyecto está registrado en Indautor con el número de registro 03-2019-06-060409422700-01”, puntualizó nuestro entrevistado.

PANORAMA DE LA EDUCACIÓN MUSICAL EN MÉXICO

Gómez Díaz relató que, la educación musical en el país tiene una historia complicada y difusa. Los mayores intentos de una tal educación se hicieron en las grandes ciudades y siempre con resultados pobrísimos, aunque satisfactorios.

Recordó que, la educación musical comienza en México dentro de las iglesias, formando nuevos músicos para el servicio litúrgico. Luego de la reforma y contrarreforma, la iglesia pierde capacidad para seguir el patrocinio de sus músicos y muchos de ellos desertan para dedicarse a la docencia y la composición. Sin embargo, loa educación musical no se aplica a la población en general.

Omar Gómez precisa que, “el conservatorio de música nacional se funda en 1866 y ha formado muchas generaciones de grandes músicos. Su rango de acción, siendo nacional, sigue dejando descubierta la educación pública. Creando un aura de exclusividad que prevalece actualmente”.

De igual forma, aseveró que, el licenciado José Vasconcelos siendo titular de la Educación promueve la creación de orquestas y propugna por la difusión del arte y su inclusión en la educación pública, pero por desgracia, éste último punto se ha visto mermado e incluso disminuido con el paso de las décadas.

EL RETO EDUCATIVO DE ESTE SEXENIO

Gómez Díaz también comentó que, de acuerdo, al boletín #103 del gobierno de México y de la Secretaría de Educación Pública (SEP), se advierte que se creará un programa de educación musical y orquestas escolares. Ahí, se subraya la importancia de la música y la coloca como un elemento importantísimo de la educación. Se menciona que comenzará con 200 niños y 32 orquestas para duplicarlo al final de 2019. Cosa que no sucedió. Además del poco alcance que dicho programa tiene.

En su momento, Esteban Moctezuma Barragán titular de la SEP declaró; “no conozco una herramienta más poderosa para crear tejido social sano, que la música”, de ahí la insistencia en que se fortalezca la preparación musical de la niñez y se puede llevar dicho conocimiento a todas las escuelas públicas, concluyó, Omar Gómez.