Especialistas del Centro de Investigación y Estudios Avanzados en Salud Animal (CIESA) de la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia de la Universidad Autónoma del Estado de México trabajan, en conjunto con el Instituto de Salud de la entidad y la Universidad de Texas, en el desarrollo de un diagnóstico certero, en humanos y perros, de la enfermedad de Chagas, así como una vacuna que prevenga el mal causado por el parásito de trypanosoma cruzi.
En entrevista, los expertos universitarios Alberto Barbabosa Pliego y Juan Carlos Vázquez Chagoyán señalaron que también realizan estudios sobre los estragos que provoca en la salud humana esta enfermedad.
Durante 2014, indicaron, en el Estado de México se reportaron únicamente 32 casos, mientras en lo que va de este año se tienen registrados 73 casos, en municipios como Zumpango (42), Tejupilco (21), Toluca, Atizapán, Teotihuacán, Tlalnepantla y Ecatepec.
Sostuvieron que a la enfermedad de Chagas no se le da la importancia que requiere, debido principalmente, a que no existe un diagnóstico certero. Desde 2008, dijeron, en el país se han registrado 1.6 millones de mexicanos con esta enfermedad.
En 2006, precisaron, realizaron un diagnóstico epidemiológico de la enfermedad en el municipio de Tejupilco, que reveló la presencia del parásito en siete por ciento de las personas y 23 por ciento de los perros.
El estudio, puntualizaron, se enfocó en municipios del sur de la entidad, como Tejupilco, Amatepec, Tlatlaya, San Simón de Guerrero y Luvianos, pues es en estos donde mayormente se desarrolla la “chinche besucona”, trasmisora de esta enfermedad y que es encontrada principalmente en casas de adobe, madera, techos de palma o de tejas.
Abundaron que la enfermedad de Chagas se caracteriza por ser un padecimiento silencioso que afecta principalmente el músculo del corazón, provocando la muerte súbita, que muchas veces es confundida con el infarto.
La forma de transmisión, indicaron, es a través de las heces de los animales, que contienen miles de parásitos y que al contacto con la piel humana, provocan comezón; penetran al cuerpo humano cuando la persona se rasca y terminan por alojarse en el corazón.
La enfermedad de Chagas, advirtieron, contagia directamente al humano y algunos de sus síntomas son: la formación, principalmente en niños, de una especie de llaga dolorosa o inflamación local y la presentación de un parpado inflamado y caído.
Sin embargo, apuntaron Alberto Barbabosa Pliego y Juan Carlos Vázquez Chagoyán, también puede ocurrir que no se presente ningún síntoma y en un periodo de entre cinco y 15 años, la persona contagiada presente problemas del corazón, arritmias, megaesófago o megacolon.
