Los delitos del orden federal presentaron un incremento de 35 por ciento en los últimos dos años, pasando de más de 8 mil a 12 mil 213, por lo que la inseguridad no sólo es una asignatura pendiente de Eruviel Ávila, sino que se agravó durante su mandato, alertó el diputado local Javier Salinas.Al realizar un rápido balance del sexto informe remitido por el mandatario saliente, Salinas Narváez recordó que además la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública (ENVIPE) 2016 señala que en el estado de México la tasa de incidencia delictiva es de 46 por ciento, siendo el robo a transeúnte o transporte público y la extorsión los delitos de mayor incidencia.
El mismo ejercicio arroja que la cifra negra de delitos (aquellos que no son denunciados ante el Ministerio Público) es de 95.4 por ciento (1.7 puntos porcentuales superior al promedio nacional); es decir, en la entidad por cada 5 delitos que se denuncian, 95 no, de tal manera que la incidencia delictiva es 19 veces superior a la registrada.
Pese a lograrse, conforme al informe, la desarticulación de 233 bandas y la detención de 960 delincuentes, la ENVIPE 2016 arroja que 70.6 por ciento de los mexiquenses considera que la inseguridad continua siendo el principal problema que aqueja a la entidad, mientras la media nacional es de 59.1 por ciento.
Pese a la implementación de más de 125 mil dispositivos de seguridad para combatir al narcotráfico –como se asegura en el informe-, destacó, en el estado de México coexisten al menos seis grupos delictivos: El Cartel Jalisco Nueva Generación (uno de los más violentos y peligrosos), Cartel del Estado, La Empresa, Nueva Empresa, Guerreros Unidos y La Familia Michoacana, por lo que las estrategias implementadas tampoco dieron resultado.
Éste último año se creó la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas del Estado de México (CEAVEM), que otorgó 074 mil servicios relacionados con el primer contacto que se establece con la víctima, según Ávila Villegas.
Sin embargo, el informe de incidencia de delitos del fuero común del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública reporta que en 2016 ocurrieron 221 mil 760 ilícitos en la entidad.
Es decir, mediante este mecanismo sólo se brindó atención a una de cada 3 víctimas de algún delito.
Por su cifra y el nivel de violencia con que se cometen, en el informe los feminicidios merecen un tratamiento especial; es irresponsable que el mandatario mexiquense excuse su ineficiencia para abatir este delito justificándose en que el tema es empleado con fines políticos.
En su informe, se congratula por la asignación, durante 2017, de 30 millones de pesos para atender la Declaratoria de Alerta de Violencia de Genero (AVG), medida que, no obstante, se implementó en menos de 10 por ciento de los municipios mexiquenses (11 de 125).
En contraste, omite mencionar el número de crímenes de género, posiblemente como una estrategia política para evitar su desgaste con miras a la contienda presidencial.
Sin embargo, cifras de la propia Fiscalía mexiquense registraron, entre enero de 2015 y diciembre de 2016, la comisión de 629 crímenes de odio en contra de mujeres mexiquenses. De éstos, 263 ocurrieron en 2016 (41.81 por ciento).
En lo que va del presente año han sido asesinadas 174 mujeres, con lo que en la segunda mitad de la gestión de Eruviel Ávila Villegas han muerto 803 mujeres. De éstos, sólo 296 (36.86 por ciento) asesinatos fueron investigados como feminicidios, a pesar del mandato de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) que obliga a investigarlos con perspectiva de género desde la resolución que ordena la reapertura del expediente de Mariana Lima Buendía.
