Incrementar la atención médica a personas con trastorno del espectro autista, aprueba la 60 legislatura

Para mejorar las condiciones de vida e impulsar la integración e inclusión en la sociedad de los mexiquenses con trastorno de espectro autista, la 60 Legislatura aprobó por unanimidad, a propuesta de los diputados Juan Jafett Millán Márquez y Lilia Urbina Salazar, que las autoridades estatales y municipales implementen políticas y acciones encaminadas a su tratamiento, así como un banco de datos estatal que permita diagnosticar y orientar dichas políticas públicas.

De acuerdo con la iniciativa presentada en nombre del Grupo Parlamentario del PRI, la reforma y adición del artículo 5 de la Ley para la Atención y Protección a Personas con la Condición del Espectro Autista en el Estado de México también establece que sea tarea de las autoridades diseñar, difundir, instrumentar e implementar campañas de información y concientización, así como estimular la realización de estudios e investigaciones para el diagnóstico y tratamiento de personas autistas.

El dictamen formulado por las comisiones de Salud, Asistencia y Bienestar Social y Para la Atención de Grupos Vulnerables, leído ante el pleno por la diputada Berenice Medrano Rosas (morena), detalla que será obligación de las autoridades impulsar convenios de colaboración con los sectores privado y social para realizar acciones tendientes a la investigación y tratamiento del autismo, además de procurar que en los sistemas municipales para el desarrollo integral de la familia existan especialistas en el tratamiento.

“Corresponde al Estado, y de manera particular a los legisladores, asegurar el respeto y el ejercicio de los derechos que asisten a las personas con la condición de espectro autista e implementar políticas y acciones que correspondan a esos fines”, indica el dictamen.

De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, el trastorno de espectro autista es un grupo de afecciones caracterizadas por algún grado de alteración del comportamiento social, la comunicación y el lenguaje, y por un repertorio de intereses y actividades restringido, estereotipado y repetitivo; las personas que lo padecen frecuentemente presentan epilepsia, depresión, ansiedad, trastorno de déficit de atención e hiperactividad.