México vive una crisis de violencia inédita contra periodistas y defensores de los derechos humanos: Zeferino Ladrillero

  • Derivado de las políticas neoliberales impuestas en las últimas décadas, aseguró José Antonio Lara Duque.
  • Denunció que el clima de impunidad e inseguridad ha recrudecido el despojo sistemático de bienes naturales y territorios de pueblos y comunidades indígenas.
  • Demandó contar con un protocolo integral (administrativo, legislativo, judicial) de protección a personas defensoras de los derechos humanos.

San Salvador Atenco, Edomex.- México vive una crisis de violencia inédita contra pueblos originarios, comunidades indígenas, periodistas y defensores de los derechos humanos, derivado de las políticas neoliberales impuestas en las últimas décadas, denunció, hoy aquí, el coordinador del Centro de Derechos Humanos “Zeferino Ladrillero”, José Antonio Lara Duque. 

Al dar la bienvenida al representante en México de la Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos (OACNUDH), Jan Jarab, Lara Duque dijo que en el marco de las próximas elecciones en nuestro país, el clima de impunidad e inseguridad podría recrudecerse para los periodistas y defensores de las garantías individuales. 

“Las elecciones de 2018 por su magnitud y por su cultura política generarán, sin duda, un aumento de confilctividad social, que a su vez podrían provocar un aumento de riesgo que enfrentan quienes defienden los derechos humanos, por eso me sumo al llamado de los relatores de libertad de expresión quienes adviertieron para la necesidad de una respuesta específica de estas circuntancias”, dijo el diplomático de la ONU. 

En este sentido, el abogado Lara Duque explicó que la construcción de mega-proyectos (sumamente contaminantes de nuestro medio ambiente), la violencia exacerbada hacia las mujeres, la constante criminalización de la organización y protesta social, así como la intervención armada del Estado en los territorios, ha dejado a cientos de personas desaparecidas, encarceladas o asesinadas por integrantes de grupos paramilitares. 

De igual manera, aseguró, la mercantilización, el aniquilamiento de la cultura y memoria histórica, así como la precarización del empleo, la exclusión social-territorial, la falta de acceso a la justicia y, el acceso a derechos básicos como vivienda digna, agua, electricidad, servicios médicos, han hundido al país en una espiral de violencia. 

En la plaza principal de este poblado, Lara Duque expresó que los pobladores de las comunidades y pueblos del país y, particularmente del estado de México, viven bajo una violación permanente y sistemática de los derechos humanos. 

Cabe resaltar que, durante el encuentro con el representante de la OACNUDH  se abordaron diversos temas, entre estos: Los derechos humanos al agua y a los sistemas comunitarios; a una vivienda digna; a un medio ambiente sano; a una educación de calidad y a los  derechos de los Pueblos y Comunidades Indígenas. 

Asimismo, se presentaron los reclamos en torno a los megaproyectos, y de las acciones para defensa del territorio y patrimonio cultural, así como para enfrentar desde las comunidades la violencia de género y feminicidios y las agresiones a personas defensoras. 

“No vamos a parar hasta que cesen las agresiones por parte del Estado y terminen los ataques sistemáticos y permanentes contra nuestros territorios, nuestros recursos y nuestra vida, del lucro y la barbarie que el capitalismo-neoliberal representa”, apuntó. 

Acusó la intención del Estado de blindarse a través del despliegue de leyes represivas como la Ley Eruviel y la nueva Ley de Seguridad Interior, para legitimar el despliegue del uso de la fuerza física en casos de protestas y manifestaciones populares; para herirnos o asesinarnos y, aun así, salir impune. 

“Es urgente contar con un protocolo integral (administrativo, legislativo, judicial) de protección a personas defensoras (entendiendo a toda persona que actúe en la defensa de los derechos humanos en un sentido amplio y pacífico, sin necesidad de estar adscrito a una organización o asociación, o estudios profesionales previos) que tenga como evitar la posible agresión o criminalización del Estado”, demandó. 

Hizo ver que la lucha por nuestros derechos humanos es tarea de todos, y solo juntos y organizados podremos ganar la batalla frente a tanta violencia, inseguridad e impunidad, el camino hacia ese horizonte de comunidad y prosperidad, es pues algo que tendremos que seguir construyendo de la mano.